Ventajas de tener un hijo nacido en España

En el post de hoy vamos a hablar de las ventajas de tener un hijo nacido en España.:

Tener un hijo en España tiene muchas ventajas para su solicitante y sus familiares. Te contamos todas las ventajas a continuación:

Tener un hijo nacido en España tiene muchas y variadas ventajas para sus progenitores.

Una de ellas, es que, al año de residencia, el menor nacido en España tiene derecho a la nacionalidad española. Esto conlleva muchos beneficios, ya no solamente para el menor, sino también para los padres.

El tener un hijo español permite a los demás miembros de la familia solicitar por arraigo familiar 5 años de residencia comunitaria como familiar de comunitario.

Otra ventaja es que incluso si alguno de los progenitores está en el país de origen, puede una vez obtiene la nacionalidad el menor, pedir un visado por familiar de comunitario que no está sujeto a ningún tipo de restricción. Es decir, el consulado no tiene capacidad de resolver en contrario o poner ninguna pega.

Tener un hijo nacido en España significaba un procedimiento un poco largo y complejo, que podía durar incluso un par de años. Pero últimamente se ha modificado el procedimiento para la nacionalidad, acortándolo en la mayoría de los casos a solo un par de meses.

Otros beneficios son, que los padres que piden la residencia por familiar de comunitario, no tienen por qué justificar medios económicos, solamente ser padre de un español, la cual es una enorme ventaja.

Además, la residencia que obtienen los padres por tener un hijo español, le da la opción de trabajar o no trabajar.

Aquellos que sean padres de comunitarios, también podrán obtener la residencia por 5 años.

Se ha reducido su parte burocrática, por lo que se supone que, en unos pocos meses, el menor no comunitario, nacido en España después de un año de residencia puede obtener la nacionalidad española de un modo más sencillo y más rápido.

Cuando decimos que tiene que tener un año de residencia, este año de residencia no tiene que ser inmediato.

Nuestro despacho ayudó a tramitar un caso de una persona nacida en Melilla, y que, con más de 40 años, obtuvo su residencia. Pasado un año, solicitó su nacionalidad.

Es decir, que no es nacer y tener la residencia. Sino nacer y tener la residencia a lo largo de la vida de la persona. No tiene por qué ser inmediato.